- La tapa encaja en el cabezal de la taza de café con un clic, no es necesario enroscarla. Para retirarla, usa un objeto fino y plano a fin de desencajarla. Antes de hacerlo, asegúrate de que ya has sacado el retenedor.
- El retenedor es una pieza extraíble que se sitúa en la parte inferior de la tapa y que sirve para que la taza se cierre herméticamente. Si quieres retirarlo, introduce una moneda en la ranura y gírala en el sentido de las agujas del reloj.
- Monta la tapa, el cabezal y el retenedor, ¡y listo! Tu taza de café ya está puesta a punto.
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